Caí en aquella ocasión como caen
los tontos,
Con su mirada, su sonrisa y su
forma de hablar
De inmediato la comencé a amar,
Intenté hablarle con palabras
bonitas,
Decirle que me interesaba
conocerla,
Robarle la mirada y asaltar a su
corazón,
Meterme despacito en su memoria,
Estar presente en sus sueños,
Volverme importante para ella era
lo que buscaba,
Ya que mi joven corazón la
deseaba,
Con una cámara capturé la belleza
de la dama,
Ella me miraba, me sonreía y con
eso me mataba,
Tomaba mis manos y en su espalda
las colocaba,
Yo sonrojado no sabía lo que
pasaba,
Le abracé y le hice sentir el
calor de mi corazón
La tomé y no la solté, tenía una
buena razón
Para que conmigo llegue al altar,
Darle una vida de amor y
comprensión
Respeto y cariño,
Porque la pienso hacer feliz,
Esa es mi misión.
Bolaños Gutiérrez José Roberto (20/Agosto/2014)
De Tu Mano.
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