Nunca olvidaré aquella noche de verano
Mirabas al mar mientras tomabas mi mano
Una brisa tocó tu mejilla mientras tú
sonreías
Y me compartías tus historias llenas de
alegrías
No te sentía distanciada desde aquél
entonces
No lo comprendí, ¿en qué momento te
perdí?
¿En qué momento el verano se convirtió
en invierno?
¿A qué hora comencé a vivir este
tormento?
Nuestro colchón ya no era cálido
Era más bien un pedazo de hielo
Lo que ayer era un pedacito de cielo
Se convirtió en el mismísimo infierno
Ya no sé si contarte más historias
Que me frustran a cada día
Con tono de tristes memorias
Como una triste y frustrante melodía
Nunca olvidaré aquella noche de verano
Mismo que al parecer fue un esfuerzo en
vano
Con la brisa te canté y besé tu mejilla
Mientras corríamos como tontos en la
playa por la orilla
Y con el hielo no queda más, me hice un
helado
De algo tenía que servir ese recuerdo
frustrado
Y de ti ya no sé nada, es mejor así
De algún modo soy feliz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario