Nunca
imaginé que las estrellas me llamarían por mi nombre,
Mucho menos que me
invitaran a bailar
Con la gran música del cielo
Que los astros solo saben
tocar,
Por ahí hay una doncella, blanca a mi gusto,
Su nombre "la luna", era una
bella dama,
Tímida para variar,
Pero tenía algo que me encantaba,
Su manera de
hablar.
La invite
para una pieza danzar,
Se puso roja y me empecé a emocionar,
Era una bella dama
hay que admitirlo,
Las estrellas me habían invitado,
Me sentía solo esa es la
verdad
Pero hoy me quedo con la luna que me ha de conquistar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario